Dr. Ricardo Cesar Lescano. Miradas Frontales.
Cuando el artista sabe que cuerda tocar, el desarrollo de su trabajo se hace relativamente fácil y ejecuta su obra prescindiendo de posibles beneficios, porque éstos son inherentes a la misma ejecución. La artista israelita, Janna Shulrufer, pareciera concebir esta idea en sus pinturas, indicando rasgos de marcada personalidad y nobleza, como si la simplicidad y la austeridad funcionaran como elementos centrales de la calidad estética.
Con trazo vigoroso y categóricas combinaciones colorísticas, Janna Shulrufer, define su concepto de la figuración en el arte, cara a cara frente al mundo, confirmando que la poesía es factible. Porque la condición formal de sus pinturas, reflejando refinadas emociones e incisivos significados, se proyectan como puentes que conectan la imaginación y la realidad.
La articulación alegórica de personas o animales muy definidos, mirando frontalmente como en sus obras “Toros” o “Repatriación en el toro” sugieren la potencia de la demanda, la afirmación de lo viviente, advirtiendo la presencia del arte como elemento revelador frente a la felicidad y la tragedia subyacentes en la humanidad. Se podría arriesgar una interpretación relacionada a la condición figurativa de sus pinturas, indicando que ellas proponen una reflexión silenciosa sobre la naturaleza de los seres vivos, desde el dolor intrínseco de la existencia y la inevitable fatalidad hasta el placer de las fragancias que recogen en su paso por la vida.
La descabellada artificialidad predominante en el arte actual donde se intenta a cualquier costo instalar la genialidad del autor, no confunde a ciertos artistas como Janna. Su trabajo es directo como mirar de frente las verdaderas emociones o los sentimientos profundos que todos experimentamos. Son puntos de partida, es decir que sus pinturas se nutren de ideas y sensaciones que se funden en el espacio pictórico, definiendo un particular proceso que convierte a la acción en arte.